La CHG recibe 48 alegaciones a los planes de gestión del riesgo de inundación (PGRI) de las demarcaciones del Guadalquivir, de Ceuta y de Melilla

14 octubre 2021

Con este mecanismo de participación ciudadana, la CHG culmina la revisión y actualización de los PGRI de segundo ciclo, en cumplimiento de la Directiva Europea de Inundaciones.

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), organismo dependiente del Ministerio para la Transición y el Reto Demográfico, ha finalizado la consulta pública de los planes de gestión del riesgo de inundación de las demarcaciones hidrográficas del Guadalquivir, de Ceuta y de Melilla. Estos documentos de competencia estatal, elaborados por el Organismo de cuenca, tienen como objetivo reducir las consecuencias de las inundaciones sobre la salud humana, el medioambiente, el patrimonio cultural y la actividad económica, y son de obligado cumplimiento para los Estados miembros. 
 
El mecanismo de participación pública desarrollado por la CHG se inició el pasado el día 23 de junio con el anuncio del proceso en BOE y en la web de la CHG, además de la notificación escrita a un total de 436 organismos e instituciones. Tras tres meses de exposición pública, el proceso se ha saldado con la recepción de 48 escritos de colaboración y alegaciones, que serán respondidos en su totalidad y aquellos que sean pertinentes, incorporados al documento final. 
 
En el marco de la consulta pública, también se han celebrado dos jornadas de presentación de los PGRI, con el fin de dar a conocer a la ciudadanía en general y a las administraciones afectadas e interesadas en particular los distintos aspectos de los planes.
 
Para completar la participación ciudadana, se prevén próximos encuentros bilaterales con los representantes de los municipios de mayor incidencia.
 
El Plan de Gestión del Riesgo de Inundación (PGRI) 
Los documentos sometidos a consulta pública constituyen la culminación a a la tercera etapa de la Directiva Europea para la Evaluación y Gestión de los Riesgos de Inundación y su transposición al ordenamiento jurídico español. 
 
Esta directiva consta de tres fases que se revisarán cada seis años: 
1. Evaluación Preliminar del Riesgo de Inundación (EPRI) y la identificación de las Áreas con Riesgo Potencial Significativo de Inundación (ARPSIs).
2. Elaboración de Mapas de Peligrosidad y Riesgo de Inundación.
3. Elaboración de Planes de Gestión de Riesgo de Inundación, fase en la que nos encontramos en la actualidad. 
 
La Confederación, como organismo responsable de elaborar el Plan de segundo ciclo, incorporará los programas de medidas aportados por las entidades locales, autonómicas y estatales.
 
En este sentido, el documento contempla distintos niveles de agrupación de las medidas: 
- Por ámbito territorial en el que aplica la medida: nacional, autonómico, demarcación y ARPSI 
- Por fase de gestión del riesgo a la que contribuye la medida: prevención, protección, preparación y recuperación
- Por tipología de medida, de acuerdo con la Instrucción de Planificación Hidrológica y los grupos de reporting establecidos en coordinación con el Plan Hidrológico de cuenca. 
 
Objetivos del PGRI 
El principal objetivo de estos Planes es lograr una actuación coordinada entre las administraciones y la sociedad para reducir las consecuencias negativas de las inundaciones. 
 
La preparación ante las inundaciones, el incremento de la percepción del riesgo, la adopción de estrategias de autoprotección y una mayor sensibilización son esenciales para aplicar con éxito las medidas que se contemplan en el PGRI, por lo que una de las acciones más importantes previstas en este ciclo es la elaboración e implantación de una Estrategia Nacional de Comunicación del riesgo de inundación y adaptación al cambio climático.
 
Para este segundo ciclo de los PGRI se ha mejorado también la identificación de los elementos en riesgo (hospitales, colegios, centros de mayores, lugares de concurrencia pública destacada, instalaciones de energía, infraestructuras ferroviarias, aeroportuarias, etc.) en estrecha colaboración con las autoridades de Protección Civil, siendo ahora la información que ofrecen los mapas de riesgo más precisa y ajustada a las necesidades de la gestión en la emergencia.
 
Junto a esta mejora de conocimiento, los PGRI también profundizan en el estudio del impacto del cambio climático. Estos planes suponen la consolidación de los programas de adaptación al riesgo de inundación e incluyen el desarrollo de programas específicos para el incremento de la resiliencia en los sectores o ámbitos territoriales más afectados. 
 
Otro de los aspectos fundamentales de los documentos radica en la predicción de avenidas y el sistema de alerta. En este segundo ciclo se contempla la modernización y optimización de las redes de control, el incremento de puntos de medición y el desarrollo de herramientas informáticas necesarias para mejorar la gestión de los recursos hídricos en situación de avenida.
 
Con el fin de impulsar las soluciones basadas en la naturaleza, los nuevos Planes también contemplan medidas para mejorar el estado de las masas de agua, enfocando la gestión del riesgo de inundación hacia acciones sostenibles y eficientes. Además, potencian la ejecución de medidas que incrementen el espacio fluvial, la recuperación de hábitats, la creación de llanuras de inundación y retranqueo o la eliminación de obras de protección obsoletas o con poca funcionalidad, todo ello en coordinación con la planificación hidrológica y la protección de los ecosistemas.
 
 
Programa de Medidas de la Demarcación Hidrográfica de Ceuta
El documento correspondiente a la demarcación ceutí plantea un presupuesto de 1,52 millones de euros, de los que 1,09 millones corresponden a la ejecución de medidas de prevención, como el mantenimiento y conservación de cauces, estudios de mejora del conocimiento o la adaptación de elementos en zonas inundables. 
 
También destacan las medidas de protección, con un importe de 430.000 euros, como la redacción de proyectos de restauración fluvial e hidrológico-forestal, y los programas de mejora de la continuidad fluvial y de sedimentos.
 
Programa de Medidas de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir
El borrador de la demarcación contempla un presupuesto de 216,23 millones de euros. De ellos, el 69,9 % del total, 151,09 millones de euros, se corresponde con medidas de protección como los proyectos de restauración fluvial (56,86 millones) y los programas de mejora de la continuidad fluvial y la recuperación del espacio fluvial (46,67 millones). 
 
Por su montante -34,6 millones de euros- también destacan las actuaciones de prevención tales como el mantenimiento y la conservación de cauces, los estudios de mejora de conocimiento o la adaptación de elementos en zonas inundables. 
 
En el ámbito de la preparación, con un presupuesto de 15,90 millones de euros, se contempla el mantenimiento de las redes de medidas hidrológicas y la mejora de las redes de observación meteorológica.
 
Programa de Medidas de Demarcación Hidrográfica del Melilla
Para la Ciudad Autónoma se prevé un presupuesto de 4,33 millones de euros, de los que la mayor parte -3,25 millones- corresponden a las medidas de protección como las reflejadas para la restauración fluvial.
 
También destaca el presupuesto dedicado a actuaciones de prevención: 1,08 millones de euros para la ejecución de programas de mantenimiento y conservación de cauces, estudios de mejora de conocimiento o adaptación de elementos en zonas inundables.