INTRODUCCIÓN
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Por estemotivo, se ha puesto enmarcha un plan
de actuación con el objetivo de cumplir con los
plazos que estipula la ley. Aunque no se puede
negar que se trata de un retraso histórico, tam-
poco puede obviarse que el proceso de rever-
sión de competencias provocó un incremento
considerable del volumen de expedientes.
La puesta en marcha del plan de actuaciones,
que se desarrolla en distintas áreas de actuación
(refuerzo de personal, procedimientos admi-
nistrativos con la elaboración de un calendario
de resolución de expedientes y modernización
de los sistemas informáticos), pretende, básica-
mente, que la Comisaría de Aguas y, en defini-
tiva, la Confederación Hidrográfica del Guadal-
quivir responda como administración pública a
los principios de eficacia, celeridad y transpa-
rencia. En resumen, el objetivo no es otro que el
demejorar la atención a los ciudadanos evitando
numerosas situaciones de inseguridad jurídica.
En definitiva, una vez que las aguas han vuelto
a su cauce y que se ha superado el proceso de
traspaso y reversión de competencias, la Con-
federaciónHidrográfica del Guadalquivir tiene
ante sí un enorme reto: superar las numerosas
dificultades que se ha encontrado tras ‘prestar’
durante tres años su gestión, encauzar la anó-
mala situación que existía y desarrollar nuevas
actuaciones para mejorar la calidad de vida y
la seguridad de numerosos ciudadanos andalu-
ces, extremeños, castellano-manchegos, mur-
cianos, melillenses y ceutíes. También consti-
tuye uno de los principales objetivos gestionar,
conservar y mejorar el ingente patrimonio
hidráulico que permite garantizar el abasteci-
miento a más de cuatro millones de personas y
el riego de 800.000 hectáreas de terrenos agrí-
colas de nuestras comunidades autónomas.
