Joaquín Páez: "Si queremos garantizar el futuro del agua, es imprescindible trabajar para que economía, agricultura y ecosistemas estén perfectamente integrados".

30 October 2018

El presidente de la CHG reflexiona en la Universidad de Sevilla sobre la limitación del recurso y sus consecuencias para la economía y el empleo del campo andaluz, principal usuario de este recurso en la cuenca.

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, Joaquín Páez, ha defendido la necesidad de trabajar para que economía, agricultura y ecosistemas estén perfectamente integrados, como única vía para garantizar el agua en la cuenca del Guadalquivir.

En el transcurso de la inauguración de las "I jornadas Agua, Economía y Sociedad" de la Universidad de Sevilla, Páez ha reflexionado sobre el papel de la agricultura en la cuenca, principal uso, ya que consume el 88% de la demanda de agua que gestiona el Organismo, frente al 10% que consume el abastecimiento, y el escaso 2% de la industria.

En este sentido, el presidente de la CHG ha reconocido la importancia que tiene este sector para la economía de la región, "vertebrada por la agricultura", que por otro lado requiere desarrollarse con las mayores garantías ambientales. "Es completamente necesario que economía y medioambiente tengan, por lo menos, el mismo valor en nuestra cabeza. Si somos capaces de gestionar el agua convenientemente para que la agricultura sea un sector con alta capacidad de crear empleo, al tiempo que nos aseguramos el mantenimiento de nuestros ecosistemas, estamos facilitando tener más oportunidades de futuro", ha explicado.

Para Páez, los ecosistemas son los bancos del futuro, "los lugares donde encontrar los recursos para poder desarrollarnos. De su conservación y permanencia dependerá nuestra riqueza social, económica y medioambiental". Para ello, cree indispensable que la gestión del agua se realice en base a "no comprometer el recurso y conocer sus límites; gestionar desde la realidad, atendiendo muy especialmente a las consecuencias del cambio climático; e integrar la presión económica de la agricultura y medio natural, para la supervivencia y enriquecimiento de ambas"